En busca de recetas deliciosas, saludables y fáciles de preparar, la crema de calabacín y garbanzos se postula como una excelente opción. Esta sopa, con su textura suave y sabor sutilmente terroso, conquistará a todos los paladares, desde lo más exigente hasta los pequeños comensales.
El atractivo principal de esta receta reside en su sencillez y versatilidad. Los ingredientes protagonistas, el calabacín y el garbanzo, son ricos en nutrientes y proporcionan una base nutritiva para una comida completa. Además, la crema se puede personalizar con diferentes especias y guarniciones a tu gusto, adaptándola a tus preferencias y necesidades culinarias.
La preparación: Un deleite paso a paso
La elaboración de esta sopa, gracias a su sencillez, es un verdadero placer. Empezarás sofriendo cebolla picada junto a pimiento verde y amarillo , añadiendo tomillo y/o cúrcuma para dotar al plato de un aroma delicioso y especiado.
Después incorporaremos el calabacín cortado en trozos grandes que serán cocinados con vino blanco y caldo hasta alcanzar una textura tierna y fácil de triturar. La incorporación del garbanzo cocido añadirá cremosidad y riqueza a la sopa, creando una combinación armónica de sabores y texturas.
El toque final: Dulzura y textura
Una vez triturada la mezcla con un batidor de mano o en la Thermomix, queda llegar al punto final. Para asegurarnos de conseguir una crema suave y deliciosa, podemos añadir queso rallado para aportar dulzor y cremosidad, o bien optarlos por levadura nutricional para aquellos que siguen una dieta vegana.
Esta última opción no solo añade un sabor más intenso a la sopa, sino que también aporta un aporte nutricional rico en proteínas esenciales. A este punto ya puedes ajustar las especias al gusto, con un toque de sal y pimienta, y servir la crema caliente, degustándola como plato único acompañando con que puedo acompañar una crema de calabacín un pan integral tostado o crackers, incluso de guarnición huevos duros para darle un plus gourmet.
Variaciones: ¡Degusta lo mejor!
La crema de calabacín y garbanzos, por su versatilidad, te invita a experimentar con diferentes variaciones. Puedes añadir especias como jengibre, pimentón dulce o picante, o incluso una pizca de nuez moscada para un toque aromático diferente.
Para potenciar el sabor, se puede incorporar un chorrito de zumo de limón al final de la cocción, creando una combinación fresca y refrescante. También puedes añadir verduras como zanahoria, coliflor o patata, enriqueciendo la sopa con nuevos sabores y texturas.
Thermomix: ¡Tu aliado perfecto!
La elaboración de esta crema en la Thermomix resulta sencilla y rápida. Puedes utilizar el programa «Caldo» para cocinar los calabacines y garbanzos al vapor, conservando sus nutrientes y sabor original. El vaso de la Thermomix es tu mejor aliado para triturar la mezcla hasta obtener una crema suave e irresistible.
Te proponemos la siguiente receta para crema de garbanzos thermomix:
- 1 cebolla picada
- 1 pimiento verde picado
- 1 pimiento amarillo picado
- 2 dientes de ajo picados
- 1 cucharada de tomillo fresco picado
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½ cucharadita de cúrcuma en polvo
Una vez tengas los ingredientes sofritos, añade al vaso:
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500 g de caldo de verduras
- 500 g de calabacín cortado en trozos medianos
- 400 g de garbanzos cocidos escurridos
Programa la Thermomix al vapor durante 15 minutos. Una vez listo el programa, triturar todo hasta obtener una crema suave y homogénea.
Conclusión
La * crema de calabacín y garbanzos* es un plato sencillo, saludable y delicioso que ofrece múltiples posibilidades para adaptarse a nuestro gusto. Su textura cremosa, su sabor sutil y su versatilidad lo convierten en una opción perfecta para cualquier ocasión.
Experimentar con diferentes especias, guarniciones y acompañamientos es una parte divertida de esta receta. Anímate a crear tu propia versión de la crema de calabacín y garbanzos y disfruta del placer de los sabores caseros.
Ingredientes

Para preparar esta deliciosa crema de calabacín y garbanzos, los ingredientes que nos servirán como base son:
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1 cebolla mediana picada. La cebolla aportará dulzura y sabor al sofrito inicial.
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1 pimiento verde picado. Su toque ligeramente amargo contrasta a la perfección con el dulce del calabacín y el garbanzo.
- 1 pimiento amarillo picado. Añade color, textura y un aroma más intenso a la sopa.
- 2 dientes de ajo picados finamente. El ajo realza el sabor de los vegetales y le aporta profundidad al plato.
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1 cucharada de tomillo fresco picado. El tomillo aporta un aroma fresco y ligeramente especiado
- ½ cucharadita de cúrcuma en polvo (opcional). La cúrcuma es aromática, da un toque anaranjado a la crema y tiene propiedades antiinflamatorias.
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500 g de calabacín cortado en trozos grandes. Es el ingrediente principal de la receta y proporciona una textura suave.
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400 g de garbanzos cocidos escurridos. Los garbanzos aportan cremosidad, proteína y un sabor más intenso a la sopa.
Adicionalmente para dar un toque final:
- 50 g de queso rallado (parmesano o gratinador) o 3 cucharadas de levadura nutricional. Puedes elegir si prefieres un toque de gratitud o buscas una versión vegana.
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Sal y pimienta al gusto. No olvides sazonar adecuadamente para realzar los sabores.
- Compartirla con tus seres queridos y disfrutar de un momento agradable degustando esta exquisita sopa.
Preparación paso a paso
Para lograr una crema de calabacín y garbanzos deliciosa, te presento la siguiente guía de preparación paso a paso:
1. Sofrito aromático: En una olla mediana o cacerola grande, calienta un chorrito de aceite de oliva a fuego medio. A continuación, agrega la cebolla picada, el pimiento verde y el pimiento amarillo, sofriéndolos durante unos 5 minutos hasta que estén ligeramente blandos.
2. Incorporación del ajo y las hierbas: Agrega los dientes de ajo picados al sofrito y cocina por otro minuto más, revolviendo constantemente para evitar que se quemen. Después, añade el tomillo fresco picado y la cúrcuma en polvo (si lo utilizas) y sigue cocinando durante 30 segundos para liberar aromas.
3. Cocción del calabacín: Agrega los trozos de calabacín al sofrito y mezcla bien con las demás verduras. Vierte el vino blanco sobre la mezcla y deja que se evapore por unos minutos, incorporando el caldo de verduras a continuación y asegurando que cubra los ingredientes. Llevar a ebullición, luego bajar el fuego a medio-bajo y cocinar durante 15-20 minutos, o hasta que el calabacín esté muy tierno al insertar un cuchillo.
4. Añadir los garbanzos: Incluir los garbanzos cocidos escurridos en la olla y mezclar bien con el resto de los ingredientes. Cocina a fuego lento durante otro 5 minutos para integrar los sabores.
5. Triturar y finalizar:
* Con batidora tradicional: Retira un poco del líquido caliente de la olla (para evitar que se recaliente el motor) y transfrírala a un recipiente aparte. Después, coloca toda la mezcla con las verduras y garbanzos en una batidora y tritura hasta obtener una crema homogénea. Vuelve a agregar gradualmente el líquido reservada para ajustar la consistencia.
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Con Thermomix: Programa la Thermomix al vapor durante 15 minutos. Una vez listo, triturar todo hasta obtener una crema suave e homogénea. Si quieres una textura más cremosa, puedes volver a programar la velocidad turbina por unos segundos adicionales.
6. Añadir sabor final:
Agrega el queso rallado o la levadura nutricional y remueve suavemente para que se derrita un poco en la crema caliente.
- Prueba y ajusta la sazón según tu gusto, añadiendo sal y pimienta al gusto.
7. Servir: Sirve la crema de calabacín y garbanzos caliente, decorada con unas hojitas de tomillo fresco y unas rodajas de pan integral tostado, si lo deseas.
¡Buen provecho!
- Prueba y ajusta la sazón según tu gusto, añadiendo sal y pimienta al gusto.
Propiedades nutritivas
La crema de calabacín y garbanzos es una receta no solo deliciosa, sino también nutricionalmente rica.
Propiedades del calabacín:
- Bajo en calorías y grasa: Es excelente para mantener un peso saludable.
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Rica en agua y fibra: Ayuda a la digestión y a sentirnos saciados por más tiempo.
- Fuente de vitamina C: Un poderoso antioxidante que fortalece el sistema inmunitario.
Propiedas del garbanzo:
- Alto contenido proteico: Es ideal para vegetarianos y veganos, ya que ofrece una buena cantidad de proteína vegetal.
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Rica en fibra: Favorece la salud digestiva.
- Buena fuente de hierro y magnesio: Minerales esenciales para la producción de glóbulos rojos y el funcionamiento muscular, respectivamente.
Esta crema es una excelente opción para obtener vitaminas, minerales y fibra, además de ser baja en calorías. Es ideal como parte de una dieta saludable y equilibrada.
Variantes y sugerencias

Creamos tu sopa: variantes y sugerencias para la crema de calabacín y garbanzos
A esta receta base se le puede dar un toque personal con diferentes variantes:
Sabores:
- Curri: Agregar una cucharadita de curry en polvo al sofrito junto a las especias aporta un sabor exótico.
- Picante: Incluir 1/2 cucharadita de pimentón picante o un poco de chile rojo picado para quienes disfrutan del calor.
- Chipotle: Una pizca de chile chipotle en adobo (en aceite) añade profundidad y un ligero toque ahumado.
Texturas:
- Con pan crujiente: Servir una rebanada de pan integral tostado con ajo y aceite de oliva como acompañamiento para añadir textura.
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Crumble de nueces: Espolvorear unos trozos de nueces picadas crudas para dar crocantes finales.
- Topping vegano: Usar semillas de calabaza o girasol tostadas para un toque crujiente y una textura deliciosa.
Complementos:
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Sésamo: Disolver 1 cucharada de pasta de sésamo en dos cucharadas de agua caliente para crear una salsa que le dé un toque diferente.
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Yogur vegetal: Una cucharadita de yogur vegetal (coco, almendra) por parte ayuda a aderezarla y contrasta con el sabor vegetal.
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Cilantro fresco: Una ramita de cilantro picado es un toque aromático ligero y refrescante.
Sugerencias adicionales:
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¡Combínalos! Prueba diferentes combinaciones para crear tu propia variante favorita
Para llevar a otro nivel:
- Servir la crema caliente en vasos o tazas pequeñas para un aperitivo elegante.
- Usar moldes para elaborarla como canelones rellenos con el puré y alguna guarnición de las opciones sugeridas
Consejos para servir
Para que tu crema de calabacín y garbanzos sea aún más irresistible, aquí tienes varios consejos para el servicio:
- Temperatura: Sirve la sopa caliente. La temperatura agradable realza su sabor y textura suave. Si quieres una presentación más original, puedes servirla templada, ideal para un día otoñal.
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Vasos o Tazas: Elige recipientes que complementen la apariencia de la sopa. Vasitos pequeños y elegantes son perfectos para aperitivos, mientras que tazas gruesas y acogedoras se prestan a un almuerzo o cena informal.
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Presentación:
- Crema con contraste: Crea capas de crema y puré de garbanzos para un efecto visual más llamativo.
- Decoración colorida: Usa unas ramitas de tomillo fresco, hojas de cilantro, rosetoncitos de pimentón picante o aceite de oliva decorativo; se ve atractivo y aporta aroma.
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Acompañamientos: Ofrecer acompañamientos variados incrementa el atractivo visual del plato:
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Crustas de pan integral: Un detalle crujiente que contrasta con la textura suave.
- Hojas verdes como rúcula o espinacas baby para un toque fresco y ligero.
Tips extra:
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Añadir unas gotas de lima por encima justo antes de servir para dar un toque cítrico.
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Sírvela con una cucharadita de pesto rojo homemade, ideal para combinar sabores italianos.
Con estos consejos, tu crema de calabacín y garbanzos será más que deliciosa; la presentación será increíble y se convertirá en el plato estrella de tu mesa.
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Conclusión
La crema de calabacín y garbanzos es una receta versátil y nutritiva que combina sabores frescos con un toque cremoso y reconfortante.
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Sus ingredientes simples, accesibles y beneficiosos para la salud
permiten múltiples interpretaciones culinarias: desde su versión tradicional hasta variantes exóticas o innovadoras.
Con los consejos de presentación y acompañamientos, podrás convertir esta sopa en una experiencia gastronómica memorable.
¡Anímate a explorar las posibilidades que esta receta te ofrece!